ALFREDO AZCARAT VARELA
THE BAJA POST/EDITOR
NO se trata de defender a Genaro García luna, el ex secretario de Seguridad, que fue detenido,, juzgado y declarado culpable por autoridades de Estado Unidos, nada tuvo que ver la autoridad mexicana que, semanas después de la elección que ganó AMLO, salió del país y se fue a vivir a Miami, el Gobierno actual nada tuvo que ver en esto.
Defender al INE no es defender al fraude ni ser del bloque conservador o un “corruptazo” recordemos que el peor fraude electoral de la Historia de México lo operó uno de los hombres de mayor confianza del régimen actual: Manuel Bartlett, que además tiene muchos temas muy tenebrosos en su biografía.
EL Domingo 26 de Febrero cientos de miles de mexicanos, quizás millones, marcharán en varias ciudades de México y del extranjero, en defesa del INE y no para defender a García Lun y Calderón, como se afirma por ahí y se necesita ser muy ingenuo para creer que la marcha es para defender a un criminal que abusó del poder policiaco parar traficar drogas y coordinar bandas de secuestradores.
Son mexicanos y mexicanas honestos la mayoría, que defienden lo que ven como un organismo ciudadano de muchos que resultaron de luchas sociales y procesos como las matanzas de estudiantes en 1968 y 1971, la guerra suco de los 70s, la elección de 1988 y otros momentos de transformación en la Historia de México.
No son corruptazos, como los llamó el Presidente, son mexicanos buscando hacer oír su voz sin ser condenados al infierno de los insultos, que han reemplazado a los argumentoso en el debate o diálogo político en el país, simplemente quieren expresar su sentir respecto al INE y que se tome en cuenta su opinión sin ser atacados.
Afirmar continuamente que quieren defender al “Súper Policía de Calderón” es un distractor, un contraataque del Gobierno y sus voceros (oficiales y extraoficiales) seguramente que la mayoría de os que marcharán defienden al INE y repudian a García Luna, pero la voz que clama en la mañana día a día, encuentra eco y credibilidad en millones de mexicanos resentidos con el pasado.
Los manifestantes del domingo no son corruptos por definición ni totalmente conservadores, habrá muchos de derecha moderado, centro izquierda, algunos incluso son personas que votaron por López Obrador y se han desilusionado con su gestión y toma de decisiones, pero en Presidencia quien no asiente y está de acuerdo en todo, es inmediatamente tachado de traídos, conservador, prianista y un lista interminable de adjetivos.
Los mexicanos que marcharán el domingo, defienden a un organismo ciudadano, independiente, resultado de décadas de lucha contra una democracia unipartidista, con elecciones organizadas por un partido de estado, el PRI, desde las Secretaría de Gobernación, no todos piensan igual, hay diversidad de ideologías entre los participantes.
Muchas ideologías y maneras de pensar se unirán en domingo, para defender un organismo que ellos consideran que ha aportado mucho para dejar atrás los tiempos de Partido Omnipotente, en un país donde un Poder Ejecutivo, que debería gobernar y conciliar a todos los mexicanos, considera enemigos e insulta con odio y mala sangre a quien se atreve a cuestionar al poder.