por 
ALFREDO AZCARATE VARELA
THE BAJA POST/EDITOR
“Una carta de amor a la literatura y a los ángeles guardianes que pusieron libros en su mesa de noche”, así describió su libro “Persona Normal”, Benito Taibo, en el teatro universitario, un sábado de primavera cachanilla, un libro que ha sido reeditado en 26 ocasiones, en tiempos donde los libros viven poco, su carta de amor al oficio literario, entendido como una dualidad de lectura y escritura, una novela que permanece sigue despertando la inquietud de leer entre los jóvenes.
Benito Taibo, es Director de Radio UNAM y un escritor , interactuó hábilmente con los asistentes al teatro universitario de la UABC, presentación de la FIL.UABC titulada X Aniversario de Persona Normal, el teatro a un 80% de su capacidad y una plática, intercambio o conversatorio, escuchar a Beato es sentarte a escuchar historias.
“Soy simplemente un lector que dio un salto al vacío y empecé a escribir”, Benito describe el oficio literario como una calle de dos sentidos, la lectura como búsqueda de una voz y, en su caso no existe la “página en blanco”, por su experiencia en el periodismo, donde trabajan con el tiempo encima para escribir una nota, contar una historia, transmitir una idean contra reloj, “si no te apuras no sale tu nota mañana”.
La magia de la literatura, para el escritor es “dar a luz”, crear, inyectar vida en personajes, que incluso van adquiriendo vida propia e independencia, viven en el interior del escritor, incluso cobran vida, dice Benito, quien además confiesa que no se atreve a leer sus libros después de terminarlos, “mis libros dejan de ser míos para convertirse en patrimonio de quien los lee”.
Persona Normal, es un libro donde el protagonista, Sebastián recorre un mundo fantástico de la mano del tío Paco, una clara referencia a su padre el escritor, crítico cinematográfico y periodista, Paco Ignacio Taibo I, así como de Mari Carmen, su mamá, esos deben ser los ángeles guardianes que le dejaban libros junto a su cama y sembraron el amor a la literatura en él, ellos son los destinatarios de la carte de agradecimiento que Benito Taibo plasmó en Persona Normal.
“Yo solamente me postro ante dos altares, el de la ciencia y el de la literatura”, dijo Taibo, dejando claro que no hay cultos ni adoración a falso ídolos por su parte, él se considera producto de una educación sentimental, que tuvo gracias a su padre, quien sembró en él ese amor por la literatura y los libros.
