por REDACCIÓN
THE BAJA POST
La planta de tratamiento de aguas residuales, bosque ecológico y parque fotovoltaico “Las Arenitas” se ha convertido en un oasis en el desierto mexicalense, con más de 605 hectáreas de superficie, 120 forestadas y un humedal que da albergue a muchas especies endémicas y migratorias, por lo que es punta de lanza en el cuidado del medio ambiente en el Estado, aseguró el director de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Mexicali (CESPM), Armando Samaniego.
El funcionario estatal estableció que el complejo es ejemplo a seguir en lo que al tratamiento de aguas residuales se refiere, “brinda grandes beneficios para nuestra población y para nuestro medio ambiente, lo que resulta de incalculable valor”.
La planta de tratamiento de aguas residuales cubre y beneficia al 45% de la población de Mexicali, al mismo tiempo trata el 100% de aguas residuales que ingresa a la red de alcantarillado sanitario de la ciudad, lo que permite reutilizar todo el volumen de agua tratada.
Más del 30% del agua tratada en “Las Arenitas” sirve para recargar los niveles del Río Hardy, que habían bajado de forma dramática, estos volúmenes de agua están dedicados para uso ambiental, un poco más del 22% se utiliza en el riego de cultivos de forrajes y mezquites y el 2.94% se utiliza para el riego de áreas verdes y un poco más del 17% lo consume la industria local.
A la par se desarrolló el parque ecológico y un humedal que brindan un tratamiento adicional para mejorar la calidad del agua, el sitio se ha convertido en un refugio de múltiples especies nativas como la víbora de cascabel, los perritos de la pradera, iguanas y varias especies de aves migratorias.
El complejo posee también una central eléctrica fotovoltaica con la que cubre el consumo de la planta de tratamiento, lo que ha reducido sustancialmente el consumo de energía de la red eléctrica, lo que trae un beneficio ambiental que equivale al desplazamiento de 435 toneladas al año de gases que producen el efecto invernadero.
