ALFREDO AZCARATE VARELA
THE BAJA POST/EDITOR
El anuncio de la trilla del cártamo cultivado este ciclo en el valle de Mexicali, abre la expectativa de la reconversión de cultivos, que se ha tratado de implementar en la zona desde tiempos del Tratado de Libre Comercio firmado en 1994 y que dejara a los productores trigueros desprotegidos ante una competencia desigual con los agricultores de Estados Unidos y Canadá, provocando problemas de comercialización y, por lo tanto, de ingresos para los productores.

Fueron 5 hectáreas las que se trillaron de esta oleaginosa, anunció el titular de la Secretaría del Campo y Seguridad Alimentaria (SCSA) de Baja California, Héctor Haros, en un valle que tiene alrededor de 200 mil hectáreas para cultivos y una Secretaría de Agricultura que parece olvidar, o tal vez no sepa a ciencia cierta, que el trigo llegó a ocupar superficies cultivadas y cosechadas cercanas a las 100 mil hectáreas, por lo que las 5 hectáreas de cártamo no pasan de ser un ensayo, una pequeña superficie que debe crecer y tener éxito con un cultivo que ya ha fracasado en el valle de Mexicali.
La propuesta de reconversión de cultivos para el área agrícola de Mexicali, no es algo nuevo, se ha buscado para devolver la rentabilidad a los productores de trigo que, en la década de los 90s vieron caer sus ingresos al ser puestos a competir en desventaja.
Esto es parte de los compromisos del Gobernador del Estado, Jaime Bonilla Valdez, pues con ello, se logrará que el valle de Mexicali vuelva a ser un campo próspero y rentable, aseguró Haros, el siguiente paso, una terminada la trilla, es validar la semilla de los híbridos de cártamo, que tienen alto contenido oleico para la industria.